José Cuervo tiene sus orígenes en 1758, cuando Don José Antonio de Cuervo y Valdés obtuvo tierras en Tequila, Jalisco para cultivar agave. En 1795, su hijo, José María Guadalupe de Cuervo, recibió la primera licencia oficial para producir comercialmente tequila, dando origen a la marca. La producción se realiza en la histórica destilería La Rojeña —la más antigua de América Latina— conservando métodos tradicionales con agave azul para preservar su legado artesanal. Su portafolio incluye referencias emblemáticas como José Cuervo Especial, Tradicional, Platino y saborizados.